Un decreto que elimina el arancel a las importaciones de hilo generó una nueva polémica. La Andi advierte que podría poner en peligro a la industria y sus trabajadores
El Decreto 1197 de 2025, que elimina temporalmente el arancel de 10% para 10 subpartidas de hilos provenientes de países sin acuerdo comercial con Colombia, abrió una de las discusiones más tensas entre el Gobierno y el sector industrial en los últimos meses. La medida, que según el Ministerio de Comercio busca “aliviar el costo de insumos” y apoyar la reindustrialización, terminó enfrentando a confeccionistas, hilanderos, sindicatos y exportadores.
El Gobierno argumenta que el arancel cero ayudará a bajar costos de producción en un sector donde los insumos representan entre 50% y 60% del gasto total de una prenda.
Según datos de la Cámara Colombiana de la Confección, más de 80% del hilo que ingresa al país proviene de China e India, una dependencia que continúa ampliándose en medio de la desaceleración industrial y las presiones sobre la producción nacional.
De hecho, con corte a septiembre, las importaciones de la categoría hilados e hilos de fibras textiles naturales alcanzaron en 2025 un total de US$99,8 millones; mientras que los hilos o hilados de filamentos continuos o fibras discontinuas manufacturadas (artificiales o sintéticas) alcanzaron US$109,1 millones.
Para Guillermo Criado, presidente de la Cámara Colombiana de la Confección, esta medida significa una victoria para la formalización, principalmente porque destaca que “se termina el contrabando de hilos y el contrabando técnico”. Añade que esto es un beneficio importante para más de 146.000 empresas del sistema moda que generan 2,5 millones de empleos.
Maria Claudia Lacouture, presidente Amcham – Aliadas, aseguró que el país está en capacidad de crear medio millón de empleosAmCham advirtió que uso de hilos sin TLC ponen en riesgo el acuerdo con EE.UU.
“Los hilanderos y algodoneros junto con los textileros y confeccionistas nos tenemos que alinear y encontrar oportunidades, puntos de convergencia y generar soluciones conjuntas que beneficien a toda la cadena productiva”, concluyó.
¿Qué dice AmCham?
AmCham advirtió que “si esos hilados se usan en prendas exportadas a EE.UU., que representa 31% del total exportado por Colombia al mundo, se puede perder los beneficios del TLC y pasar de una tarifa de 10% a cerca de 28,3% de arancel”.