Carlos Cuesta fue inicialista en el equipo dirigido por Fernando Diniz y permaneció en el campo hasta los minutos finales. / AFP

El cierre de la temporada para Vasco da Gama estuvo marcado por la frustración. Aunque el club cumplió con los objetivos deportivos de mantenerse en el Brasileirao y asegurar un cupo a la Copa Sudamericana, la derrota frente a Corinthians en la final de la Copa de Brasil dejó un sabor amargo y varios focos de crítica, entre ellos el defensor colombiano Carlos Cuesta.

Carlos Cuesta fue inicialista en el equipo dirigido por Fernando Diniz y permaneció en el campo hasta los minutos finales, cuando fue sustituido en medio de la búsqueda desesperada del empate. Su desempeño estuvo lejos de su nivel habitual y fue duramente cuestionado por la prensa brasileña. GloboEsporte le otorgó la calificación más baja del compromiso, un 3.0, tanto por parte de los periodistas como de los hinchas, señalándolo por conceder espacios en el primer gol y llegar tarde en la acción que derivó en el tanto de Depay.

Las estadísticas tampoco jugaron a su favor. En SofaScore, Cuesta fue el segundo peor calificado del equipo con 6.5, solo superando al arquero Léo Jardim. En contraste, Andrés Gómez fue uno de los puntos altos de Vasco, destacándose por su desequilibrio y protagonismo ofensivo. Así, el conjunto carioca cierra el año con balance mixto: metas cumplidas, pero una final que dejó cuestionamientos y lecciones por aprender. / COLPRENSA