El Rodadero, uno de los principales destinos turísticos de Santa Marta, ha dejado de ser el paraíso que muchos esperan encontrar, para encontrarse con lo contrario: aguas negras desbordándose por las calles, olores putrefactos que se sienten al caminar por la zona y visible deterioro del camellón.
Las aguas negras desbordas en la calle 6 con carrera 2 en El Rodadero, refleja la grave falta de gestión y responsabilidad por parte de la administración local, que no ha sido capaz de mantener en condiciones mínimas una de las cartas de presentación de la ciudad. Es urgente que se tomen medidas para recuperar estos espacios públicos y devolverle el estatus como uno de los destinos turísticos más importantes de Santa Marta, en la calle 7 con carrera primera, las rejillas de captación de aguas lluvias emiten malos olores y este se encuentra cerca a restaurantes.
A pesar de la constante afluencia de turistas nacionales e internacionales, El Rodadero se ve sumido en el abandono, con infraestructuras deterioradas y falta de sillas que los turistas deben acomodarse donde sea. En el barrio Gaira cerca de El Rodadero, también se pueden ver el descuido de estos sitios como en la Calle 16 con carrera 13 donde se encuentra un manjol en mal estado y que puede ser un peligro para cualquier persona y animal. Escombros y basuras en las calles terminan de afear el lugar como lo es en sector de Gaira en la calle 14 con 13 A, donde se puede observar una obra de alcantarilla sin terminar, y que según vecinos lleva meses así.Las grandes fisuras en la carretera y los huecos que se forman en la capa asfáltica no solo dificultan la circulación, sino que aumentan la probabilidad de accidentes graves, poniendo en peligro la vida de quienes transitan por la zona.Las calles 13 y 14 de Gaira es un problema que no puede seguir ignorándose. Con grietas profundas y baches que cubren el asfalto, el riesgo para los conductores y peatones es inminente.
El Rodadero, uno de los principales destinos turísticos de Santa Marta, ha dejado de ser el paraíso que muchos esperan encontrar, para encontrarse con lo contrario: aguas negras desbordándose por las calles, olores putrefactos que se sienten al caminar por la zona y visible deterioro del camellón.
