La demanda fue presentada por el presidente del Senado, Efraín Cepeda, quien denunció la grave afectación del ecosistema debido a captaciones ilegales de agua, desvío de cauces y la construcción de diques en el río Aracataca. Estas prácticas han alterado el equilibrio ecológico y han reducido la disponibilidad de agua potable para los habitantes del corregimiento palafítico de Bocas de Aracataca, en el municipio de Puebloviejo.

Medidas ordenadas por el fallo

La sentencia en primera instancia obliga a varias entidades, entre ellas el Ministerio de Ambiente, la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (Corpamag) y la Gobernación del Magdalena, a tomar acciones inmediatas para mitigar el daño ambiental. Entre las disposiciones clave se encuentran:

• Restauración del flujo del río Aracataca, eliminando las construcciones que obstruyen su curso hacia la Ciénaga Grande de Santa Marta.
• Sanciones a los responsables de las afectaciones ambientales y aplicación de medidas preventivas para evitar nuevos daños.
• Garantía del acceso al agua potable para las comunidades de Bocas de Aracataca, con la construcción de infraestructura necesaria para su suministro.
• Creación de una comisión especial de seguimiento, integrada por el Ministerio de Ambiente, el municipio de Puebloviejo, representantes de la comunidad y la Defensoría del Pueblo, para supervisar el cumplimiento de las órdenes judiciales.

El Senado de la República celebró la decisión, considerándola un avance clave en la defensa del medio ambiente y en la conservación de uno de los ecosistemas más importantes del país. Asimismo, reiteró su compromiso con la protección de los derechos colectivos y la sostenibilidad de los recursos naturales para las futuras generaciones.

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