La Policía Metropolitana, en coordinación con autoridades civiles, lideró el procedimiento como parte de su estrategia de control territorial y prevención del delito en la capital del Magdalena.
La Policía Metropolitana de Santa Marta, en conjunto con autoridades civiles y bajo el marco de su estrategia para el control territorial y la prevención del delito, llevó a cabo la destrucción de 180 armas entre traumáticas, neumáticas, de fogueo, deportivas, aerosoles y de caza, que habían sido incautadas en distintos operativos en la ciudad.
El procedimiento tuvo lugar como una medida para retirar de circulación elementos que representan un riesgo para la seguridad y la tranquilidad de los samarios, así como para los miles de turistas que visitan la capital del Magdalena. Estas armas, aunque no sean de fuego, pueden ser fácilmente modificadas o utilizadas para intimidar, suplantando las armas convencionales y facilitando acciones delictivas.
La jornada de destrucción se realizó bajo estrictos protocolos de seguridad y contó con la presencia de líderes comunales, inspectores de policía de las zonas norte, sur y del corregimiento de Taganga, reflejando el trabajo articulado entre las autoridades policiales y civiles.
El coronel Jaime Hernán Ríos Puerto, comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, destacó la importancia del procedimiento:
“Quitar estas armas de las calles es una medida contundente para evitar que caigan en manos de personas que no le dan una buena utilización. Nuestra tarea es preservar la vida y promover entornos seguros para todos”.
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