Durante la noche del domingo 3 de agosto, la ciudad de Santa Marta vivió una intensa jornada de lluvias que se extendió por aproximadamente cuatro horas, acompañada de fuertes vientos y tormentas eléctricas. Este fenómeno natural provocó graves emergencias en diversos sectores, incluyendo inundaciones, colapsos en el sistema de alcantarillado, cortes en el servicio de energía y complicaciones en la movilidad, especialmente hacia los destinos turísticos de El Rodadero y Minca.
Los reportes preliminares indican que al menos 60 barrios resultaron afectados, entre ellos la zona histórica de la ciudad y sectores emblemáticos como Bastidas, Los Fundadores, Pescaíto y Alto Delicias. En algunas áreas, el nivel del agua superó el metro y medio de altura, mientras que la caída de árboles obstaculizó aún más el tránsito.
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Ante la situación, se activaron los protocolos de emergencia. La Oficina para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático (Ogricc) anunció el inicio de un censo para identificar a los damnificados. El alcalde Carlos Pinedo informó a través de X que se trabaja en coordinación con los organismos de socorro para brindar atención inmediata. Bomberos y Defensa Civil también participan en las labores de inspección para determinar el alcance de los daños y asistir a las familias afectadas.
