La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) rechazó de forma definitiva la solicitud de sometimiento de Sor Teresa Gómez, cuñada de los hermanos Castaño, al concluir que su papel dentro de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) la excluye del mecanismo de justicia transicional.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas señaló que los crímenes por los que fue condenada ocurrieron mientras pertenecía a esa organización y ya fueron juzgados en la justicia ordinaria.
El tribunal transicional determinó que Gómez no cumple con el factor de competencia personal para ser admitida en la JEP, ya que se comprobó su pertenencia a las AUC y no su condición de colaboradora civil.
Con esta resolución, se cerraron tres procesos en su contra relacionados con desplazamiento forzado y apropiación de tierras en la región de Tulapas, Urabá antioqueño, entre 1997 y 2004.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas explicó que estos crímenes fueron parte de los planes de control territorial de las AUC en Urabá, bajo el mando de Fredy Rendón Herrera, alias El Alemán, y Raúl Emilio Hazbún, alias Pedro Bonito.
Además, destacó que Gómez fue condenada en la justicia ordinaria mediante dos sentencias del Juzgado Segundo Penal del Circuito de Turbo, emitidas en febrero y junio de 2019, lo que refuerza su exclusión de la JEP.
El alto tribunal recalcó que la JEP no tiene competencia sobre ex integrantes de las AUC ni sobre miembros de Bandas Criminales (Bacrim), quienes deben ser juzgados bajo la Ley de Justicia y Paz o la justicia ordinaria.
«Los exmiembros de las Autodefensas Unidas de Colombia y los miembros de Bandas Criminales no hacen parte de los destinatarios de la Jurisdicción Especial para la Paz», señaló la decisión.
Conocida como «La Negra», Sor Teresa Gómez fue señalada como una figura clave del paramilitarismo en Urabá y Córdoba. A través de la Fundación para la Paz de Córdoba (Fundapazcor), creada por los hermanos Castaño en los años 90, estuvo vinculada a lavado de dinero y legalización de tierras despojadas a campesinos. También participó en extorsiones y despojos de tierras.
En 2007, fue señalada como responsable del asesinato de Yolanda Izquierdo, líder social que denunciaba el despojo de tierras tras la desmovilización paramilitar de 2006.
La lideresa fue asesinada en el antejardín de su casa, hecho por el que Gómez recibió una condena de 40 años de prisión. Tras permanecer prófuga, fue capturada en Yumbo (Valle del Cauca) en octubre de 2013.
BOGOTÁ, (Colprensa).