Los samarios se preguntan: ¿en qué momento la histórica Casa Madame Agustine dejó de ser uno de los tesoros más antiguos e importantes del Centro Histórico de Santa Marta para convertirse en una ‘cueva de lobos’ por el estado de abandono en el que se encuentra?
Esta edificación ubicada en la intersección de la calle Grande (calle 17) con el callejón Real (carrera cuarta) quedó abandonada y a la merced de la indigencia a finales de marzo de 2023 durante la administración de la alcaldesa Virna Jhonson, cuando decidió trasladar las oficinas de la Secretaría de Planeación que allí funcionaban, al barrio Jardín.
Desde entonces esta se ha convertido en una guarida para habitantes en condición de calle, drogadictos y de los ‘dueños de lo ajeno’, quienes la dejaron casi completamente reducida a ruinas en su interior y con su fachada deteriorada; durante todos estos años la edificación ha sido constantemente sometida al saqueo por parte de los habitantes en condición de calle quienes se han robado pedazos de la puerta, han tumbado los muros, han hecho huecos, se ha llevado las baterías sanitarias y lavamanos, entre otros.
El grupo cívico ‘Vamos por Santa Marta’ que venía de recuperar las fachadas de los bienes patrimoniales recuperó el exterior de la Casa de Madame Agustine hace solos dos meses. Ccomo reza el adagio popular ‘puerca pollera no pierde el vicio”, los habitantes en condición de calle nuevamente atentaron contra la infraestructura, perforando una de las paredes laterales para ingresar y tomar el lugar para seguir realizando acciones indebidas. Esta situación atenta contra el patrimonio histórico y cultural de esta zona céntrica. El llamado es para la administración distrital para que gestione la recuperación y a la Policía para que ejerza mayor operatividad en el entorno.
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