La tutela fue interpuesta el pasado 29 de mayo por el abogado Rubén Darío Ceballos Mendoza, en calidad de apoderado de Habitamos Group Compañía de Gestión Horizontal S.A.S., Adfincar – Services S.A.S., y de vecinos de edificios como Ambar Oceanic y Casa del Mar. En su escrito, los accionantes advierten que se está presentando una grave vulneración a sus derechos fundamentales de salud, vivienda digna, dignidad humana, intimidad, propiedad privada y ambiente sano.

“Estamos frente a un cóctel de diversas enfermedades que pueden contraer las personas residentes en el sector, con la mirada apática, negligente y omisiva de las autoridades competentes”, señala la tutela. Entre las enfermedades citadas se encuentran fiebre tifoidea, disentería, cólera, hepatitis y poliomielitis, derivadas del contacto con aguas negras rebozadas y sus olores putrefactos.

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Los denunciantes acusan a entidades como la Essmar, la Alcaldía de Santa Marta, los Ministerios de Vivienda y Ambiente, Corpamag, Dadsa, Dimar y las curadurías urbanas de permitir el otorgamiento de licencias de construcción sin verificar previamente la disponibilidad de servicios públicos. Afirman que esta omisión ha agravado una crisis sanitaria, especialmente visible en puntos como la Calle 29 con Carrera 2.

“El vertimiento de aguas negras en zonas abiertas por donde transitan niños y adultos mayores, así como el nauseabundo olor y la dispersión de partículas en el aire, constituye una amenaza directa a nuestra salud. No estamos obligados a vivir en estas condiciones”, aseveró el abogado Ceballos.

La comunidad espera que, mediante esta acción judicial, se ordene la suspensión de licencias en trámite y se implementen medidas urgentes para solucionar el colapso del sistema de alcantarillado en una de las zonas turísticas más afectadas del Distrito.