El equipo periodístico de El Informador continúo el recorriendo los sectores más afectados por el fuerte aguacero registrado en las últimas horas en Santa Marta. En esta ocasión, llegamos hasta el barrio Luis R. Calvo, al nororiente de la ciudad, donde encontramos a decenas de familias aún removiendo el lodo y los escombros que dejó el agua tras su paso violento por las calles y viviendas.
Uno de los testimonios más conmovedores fue el de don José, un residente del sector que, entre el dolor y la impotencia, narró cómo perdió gran parte de lo poco que tenía: “Anoche fue cruel para nosotros. Mi señora se agravó, se lastimó una pierna, y yo todavía estoy así, vea cómo quedé. La casa se me cayó por un lado. En 26 años que llevo aquí, nunca había visto algo así”.
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Mientras algunos vecinos, como don Alejandro Huete, trabajan hombro a hombro para ayudar a los más afectados, las historias se repiten: viviendas destrozadas, pertenencias perdidas, calles intransitables y una incertidumbre que crece con el paso de las horas.
“Necesito ayuda urgente para reconstruir la pared que se me cayó. Ya los vecinos me han ayudado a sacar el barro, pero esto no lo podemos hacer solos”, agregó José, con la mirada puesta en los restos de su hogar.
La comunidad hace un llamado urgente al gobierno distrital y a la Gobernación del Magdalena para que se activen los mecanismos de atención inmediata y se presten las ayudas necesarias a quienes lo perdieron todo en cuestión de minutos.
Desde El Informador seguiremos recorriendo los distintos barrios de Santa Marta, recogiendo las voces de quienes hoy enfrentan una dura realidad y exigiendo respuestas claras de las autoridades frente a esta emergencia que ha dejado a cientos de familias damnificadas.
