Policía busca a sicarios que mataron a lavador de motos
Funcionarios de la Seccional de Investigación Criminal -Sijín- de la Policía Metropolitana de Santa Marta continúan adelantando las investigaciones correspondientes para esclarecer los móviles del crimen de Cicer Mejía Paz, lavador de motos asesinado a bala en el barrio El Pando, al sur del Distrito.
Hasta el momento, las autoridades no han reportado capturas por el homicidio del lavador de motos, aunque han trascendido detalles sobre el trabajo investigativo que se realiza en torno al caso.
Los agentes judiciales encargados informaron que están analizando las grabaciones de los circuitos cerrados de cámaras de seguridad de la zona con el fin de identificar e individualizar a los dos sicarios que acabaron con la vida de Cicer Mejía Paz. “También vamos a verificar si la víctima presentaba anotaciones judiciales en el Sistema Penal Oral Acusatorio (SPOA) o si había recibido alguna amenaza que pudiera estar relacionada con el crimen”, indicó un funcionario a cargo de la investigación.
Asimismo, en el lugar donde ocurrió el homicidio, los investigadores recolectaron los primeros testimonios de testigos y familiares de la víctima, quienes, conmocionados por el hecho, exigieron respuestas a las autoridades debido a la incertidumbre sobre los motivos del asesinato del lavador de motos, residente en el mismo sector donde se perpetró el ataque. “Tenemos una hipótesis preliminar que aún no ha sido confirmada. La principal línea investigativa apunta a un posible robo de motocicleta en el que presuntamente Cicer Mejía estuvo involucrado”, expresó un agente judicial de la Policía Nacional.
EL HOMICIDIO
El atentado en el que perdió la vida Cicer Mejía se registró en la carrera 23, frente a la cancha de fútbol del barrio El Pando, cuando la víctima realizaba su trabajo habitual, y de manera sorpresiva, fue abordado por dos sujetos que se desplazaban en una motocicleta.
Acto seguido, el parrillero descendió del vehículo, sacó un arma de fuego de la pretina de su pantalón y, sin mediar palabra, le disparó en dos ocasiones a la altura de la cabeza, provocándole la muerte de manera instantánea.