Los presuntos responsables del asesinato de la docente cienaguera Lissi Judith Camargo Noriega, asesinada el pasado 22 de mayo en un conjunto residencial cerca al Castillo de Salgar, en jurisdicción del municipio de Puerto Colombia, fueron notificados con detención domiciliaria.

Los señalados, Wilmer Enrique Mercado Mendoza y William Sanjuan Núñez, ambos de 45 años, fueron capturados por el CTI de la Fiscalía y presentados ante un juez tras ser señalados como los autores de los disparos que causaron la muerte de la docente.

La Fiscalía les imputó los delitos de homicidio agravado y tentativa de homicidio y ambos se declararon inocentes.
A pesar de la gravedad de los hechos, el fiscal del caso solicitó la medida de casa por cárcel contra los señalados de disparar sus armas de fuego e impactar a Lissi, que fue concedida por el juez en la misma audiencia.

En el informe preliminar las autoridades precisaron que los guardas de seguridad del conjunto hacían parte de la empresa Curtiembres Búfalo SAS, y el día de los hechos les incautaron dos revólveres Martial calibre 38.

Según la familia de la víctima, la decisión de darles casa por cárcel fue promovida por el fiscal Manuel Jiménez, quien argumentó que había dudas sobre lo ocurrido.

Entre los elementos presentados está la ausencia de casquillos en la escena y la posibilidad de que un funcionario de la UNP, presente en el sitio, también hubiera disparado. “Ellos no aceptaron cargos. Entonces él (el fiscal) le pidió al juez que les diera medida domiciliaria. Ahora no podemos dormir, tenemos temor de salir a la calle, tememos por nuestra familia, simplemente porque no sabemos si para callarnos nos pueden disparar, así como ya lo hicieron”, dijo Melisa Pérez Camargo, hija de la víctima, a Blu Radio.

Cabe reseñar que Lissi Judith había salido con su yerno en su camioneta la madrugada del jueves 22 de mayo y cuando volvía a la vivienda, en Salgar, fueron atacados a bala por los vigilantes del conjunto residencial donde reside Gerardo Vecino Villarreal, empresario y excongresista, quien habría alertado a los vigilantes de que supuestamente lo venían siguiendo en la camioneta donde venía Lissi y su yerno, pero todo fue un error.

Los vigilantes dispararon e impactaron del lado de copiloto la camioneta, del lado donde iba Lissi que recibió dos balazos en la cabeza. Su yerno, Ángel José Daza Cuello, fue impactado en una de sus piernas, logrando sobrevivir al ataque.