´Santa Marta demostró que sí se puede. Que con pedagogía, control y conciencia ciudadana es posible reducir al mínimo los riesgos y proteger la vida. El balance de cero quemados en Navidad no es solo una estadística positiva; es un mensaje poderoso de la comunidad´, dijo el alcalde Carlos Pinedo Cuello.

´Es un triunfo de la vida y la conciencia ciudadana, y así debemos seguir´, dijo el Secretario de Salud del Gobierno de Carlos Pinedo Cuello.

Santa Marta vivió una Navidad distinta, histórica y profundamente esperanzadora. En medio de las celebraciones del 24 de diciembre, cuando tradicionalmente las luces de la pólvora iluminan el cielo y también las salas de urgencias, la ciudad celebró un logro que merece ser destacado y defendido: cero personas quemadas con pólvora durante la Nochebuena.

Lamentablemente a diferencia de otras capitales y ciudades intermedias del país donde hubo 150 quemados, en la capital del Magdalena no se presentó, hasta ayer a las 6 de la tarde, ni un solo caso.

´El dato no es menor ni fortuito. Representa el resultado de dos años de trabajo institucional, campañas de sensibilización, controles preventivos y, sobre todo, de un cambio progresivo en la mentalidad ciudadana. La capital del Magdalena comenzó a entender que la pólvora no es sinónimo de alegría, sino de dolor, tragedia y riesgo innecesario´, declaró la administración del alcalde Carlos Pinedo Cuello a través de la Secretaría de Salud Distrital.

El titular de dicha dependencia Jorge Lastra, confirmó que durante el día y la noche del 24 de diciembre no se registró ningún caso de personas lesionadas por pólvora, una noticia que fue recibida con alivio por el sector salud y con satisfacción por las autoridades distritales.

Una buena racha que se mantuvo hasta el cierre de la edición. La positiva noticia no se limitó a la noche de Navidad. Hasta el cierre de esta edición, la Alcaldía de Santa Marta no reportó nuevos casos de personas afectadas por manipulación de pólvora, lo que confirma que la tendencia se mantuvo incluso después del momento más crítico de la temporada decembrina.

RESULTADOS DE LAS ESTRATEGIAS

Este resultado ratifica que las estrategias implementadas por la administración distrital han comenzado a dar frutos. Desde controles a la comercialización ilegal de pólvora, hasta campañas pedagógicas en barrios, instituciones educativas y medios de comunicación, el mensaje fue claro y contundente: la Navidad se celebra en familia, no en urgencias.

Desde la Alcaldía se anunció que este trabajo no se detendrá. Por el contrario, se seguirá fortaleciendo la “tarea titánica” de sensibilizar a la comunidad contra el uso de pólvora, entendiendo que la prevención es la única vía efectiva para erradicar este problema de raíz.

UNA ALERTA TEMPRANA

Si bien la Nochebuena cerró sin lesionados, las autoridades de salud recordaron que a comienzos del mes de diciembre se registraron cuatro personas quemadas, todos casos de adultos, lo que desmonta el mito de que solo los niños resultan afectados.

Los afectados fueron hombres entre los 41 y 49 años de edad, quienes sufrieron quemaduras en las manos por la manipulación de un volcán. De estos casos, dos personas continúan internadas, mientras que una ya fue dada de alta médica.

Estos episodios iniciales sirvieron como una alerta temprana y reforzaron la necesidad de intensificar las campañas preventivas. La experiencia dolorosa de estos ciudadanos se convirtió, indirectamente, en un llamado de atención para el resto de la población.

UN CAMBIO CULTURAL QUE APENAS EMPIEZA

Más allá de las cifras, lo ocurrido en Santa Marta refleja un cambio cultural que comienza a consolidarse. Cada vez son más las familias que deciden celebrar sin pólvora, entendiendo que el ruido no reemplaza la felicidad y que ninguna tradición justifica una quemadura, una amputación o una tragedia irreversible.

El silencio de las ambulancias por este motivo durante la noche del 24 fue, paradójicamente, la mejor señal de celebración. Los hospitales no colapsaron por pólvora, los médicos no atendieron emergencias evitables y las familias no vivieron la Navidad con el temor de una noticia trágica.

CELEBRAR LA VIDA, EL MENSAJE DE LA FIESTA DE NAVIDAD

Santa Marta demostró que sí se puede. Que con pedagogía, control y conciencia ciudadana es posible reducir al mínimo los riesgos y proteger la vida. El balance de cero quemados en Navidad no es solo una estadística positiva; es un mensaje poderoso que invita a mantener y profundizar este comportamiento responsable durante el resto de las festividades de fin de año.

LAS ESTADÍSTICAS

La ciudad presenta las siguientes estadísticas de las más recientes celebraciones navideñas:

En el aó 2024 no hubo lesionados con polvora.

En el año 2023 hubo cinco personas afectadas.

En el año 2022 se registraron 4 casos de personas quemadas con pólvora en Santa Marta, en 2021 el único afectado fue un menor de 11 años, y un hombre la mañana del 1 de enero de ese año después de celebrar toda la noche del 31 de diciembre de 2020.

En 2020 también se reportó un caso previo a la celebración del año nuevo, durante el diciembre de la pandemia.

La invitación de las autoridades es clara: celebrar sin pólvora es celebrar con amor, con responsabilidad y con respeto por la vida propia y la de los demás. Si este logro se mantiene y se replica, Santa Marta puede convertirse en un referente nacional de convivencia y prevención en épocas decembrinas.

Esta Navidad dejó una enseñanza clara: la mejor luz no viene de la pólvora, sino de la conciencia ciudadana.