Este domingo 15 de junio, Santa Marta fue escenario de una emotiva jornada en la que cientos de ciudadanos participaron en la Marcha del Silencio, un acto simbólico de solidaridad y rechazo a la violencia.

 La movilización partió desde la estatua de Rodrigo de Bastidas y concluyó en la Catedral, donde los asistentes elevaron oraciones por la paz y por la pronta recuperación de Miguel Ángel Uribe, joven víctima de un atentado en Bogotá.

Vestidos de blanco o con camisetas de la Selección Colombia, los participantes caminaron en silencio, banderas y carteles. Bajo el lema #FuerzaMiguel, la marcha expresó el respaldo de la ciudad a su familia y exigió justicia ante los hechos ocurridos.

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El recorrido fue pacífico y respetuoso, enmarcado en un ambiente de unión, memoria y esperanza. Santa Marta se sumó así a otras ciudades del país y del mundo que también alzaron su voz desde el silencio.

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