La Guacherna, el emblemático desfile nocturno que marca el inicio del Carnaval de Barranquilla, sorprendió a los asistentes con una invitada muy especial este sábado: Shakira en compañía de sus hijos Milan y Sasha, recorrió la carrera 44 sin ser reconocida por la multitud.

 La cantante, fiel a su amor por las tradiciones de su tierra, se camufló perfectamente entre los danzantes de la comparsa Palo ‘e Muerte, vestida con un disfraz de esqueleto multicolor, máscara de marimonda y maquillaje de calavera, lo que le permitió disfrutar del desfile como una barranquillera más.

El carnaval, que es una de las celebraciones más representativas de la cultura costeña, fue la oportunidad perfecta para que Shakira compartiera con sus hijos la alegría y el jolgorio del pueblo. 

Mientras sus pequeños se unían al entusiasmo lanzando espuma, la artista vivió la experiencia sin el asedio de las cámaras o fanáticos. 

En redes sociales, expresó su orgullo por enseñarles a sus hijos la cultura y la alegría de su gente, mostrando su profunda conexión con el folclore barranquillero.