El controvertido y polémico exsenador y exembajador Armando Benedetti está hecho para todos estos avatares por los que está atravesando. Ha demostrado que no le pasa nada. Ni en la Corte Suprema de Justicia que ha sido en varias ocasiones su juez natural, ni en la Fiscalía General. Pese a las agresiones que ha cometido contra quienes han sido sus parejas, los padres de estas mujeres tampoco han procedido contra el cuestionado personaje.
La famosa conversación telefónica con Laura Sarabia donde confesó la consecusiòn de 15 mil barras para la entonces campaña Petro Presidente, y los ataques verbales y violencia de género empleados contra quien fuera su exempleada en la UTL, tampoco han servido para detener su ascendente carrera en el Gobierno de Petro. Luego se conocería que la volenta conversación telefónica estuvo adobada de licor y cocaína, según lo dicho por quien fuera su jefe, el excanciller Álvaro Leyva Durán.
Nada le pasa. Benedetti es inmune a todo. O como bien él lo dice, ´Con el Tigre Benedetti no se metan, no joda. Se cayeron las torres gemelas y a Bin Laden le importó un culo tumbarlas, ahora que Benedetti no lo haga también. Aquí si yo hablo nos vamos todos para la cárcel´. Reza uno de los apartes de la inédita conversación que se tornó en amenaza con Laura Sarabia.
A Benedetti nada ni nadie lo tumba. Los pronunciamientos siguen aflorando, pero su Jefe está contento con tenerlo a su lado.
DEFENSORA SE OPONE
La reciente noticia de que Armando Benedetti podría ser nombrado como nuevo ministro del Interior ha generado controversia en diversos sectores.
Incluso, algunos funcionarios del Gobierno han expresado el rechazo por la cercanía de Benedetti con el presidente Gustavo Petro porque esta designación se considera clave para el futuro del proyecto político del mandatario.
El debate se intensificó con la presentación del informe anual de la Oficina de la ONU sobre Derechos Humanos en Colombia durante 2024.
En el evento, la defensora del Pueblo, Iris Marín, se refirió a la situación de Benedetti y destacó las acusaciones que pesan sobre el político, señalando que no considera adecuado ni respetuoso nombrar a un funcionario con tales señalamientos.
«Creo que no es una decisión conveniente ni respetuosa de los riesgos en derechos humanos y de violencia contra la mujer. Tener un funcionario con acusaciones tan serias, no solo de violencia de género, sino también de corrupción, no sería lo más adecuado. Si efectivamente es nombrado ministro, la Defensoría del Pueblo se coordinará con el funcionario que esté a cargo, pero mantendrá su postura sobre su nombramiento», afirmó la defensora.
Armando Benedetti, quien fue designado jefe de despacho por el presidente Petro, cuenta con una trayectoria en el ámbito diplomático, antes de este nombramiento, había ocupado importantes cargos en el Gobierno, entre ellos el de embajador en Venezuela y embajador ante la FAO en Roma.
Su carrera política ha estado marcada por la controversia, y su posible nombramiento como ministro del Interior añade un nuevo capítulo a su carrera pública.
Cabe destacar que la Defensora siempre ha rechazado cualquiera vinculación de Armando Benedetti en el Gobierno Nacional, resaltando que esa decisión enviaba “un mal mensaje para el país”, especialmente en la lucha por los derechos de las mujeres.
“El nombramiento de Benedetti es inaceptable en un contexto en el que se busca combatir la violencia de género y fortalecer la defensa de los derechos de las mujeres”, afirmó la Defensora cuando se conoció que Armando Benedetti sería uno de los asesores del Gobierno.
COHERENCIA A LOS GRUPOS ARMADOS
De otro lado, en el marco de la presentación del informe anual de ONU Derechos Humanos, la Defensora del Pueblo, Iris Marín, hizo un enfático llamado a los grupos armados ilegales para que también se comprometan con la paz en Colombia.
Durante su intervención, Marín destacó que el esfuerzo por la paz no puede depender exclusivamente del Gobierno, sino que requiere del compromiso de todos los actores armados.
La Defensora se refirió especialmente al proceso de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), señalando que este grupo armado no mostró lealtad durante las negociaciones. «Por ejemplo, en lo relacionado con el ELN, el Gobierno adelantó todos los esfuerzos que tenía a su alcance para avanzar en un proceso de conversaciones, pero en ese caso el ELN no fue leal en esas negociaciones», manifestó Marín.
Iris Marín subrayó la importancia de que los grupos armados pasen del discurso a los hechos para garantizar que los procesos de paz sean verdaderos y creíbles. “Es fundamental que estos grupos muestren un compromiso real con la paz, por el bienestar de las comunidades que tanto sufren debido a la violencia”, añadió.
Además, destacó que en el contexto de la política de Paz Total, el Gobierno Nacional ha intentado dialogar simultáneamente con varios grupos armados. No obstante, el proceso con el ELN se encuentra suspendido tras los recientes hechos de violencia en Arauca.
Esta suspensión fue seguida de nuevos episodios de confrontación en zonas como Catatumbo, Norte de Santander y en el departamento del Chocó.
Por tal motivo, la Defensora del Pueblo también hizo un llamado a la coherencia por parte de los actores armados, insistiendo en que los esfuerzos de paz deben ir más allá de las promesas y convertirse en acciones concretas que beneficien a las comunidades afectadas por el conflicto armado.